Wednesday, August 7, 2013

Kaspersky Lab crea un programa para determinar si las claves con las que protegemos nuestra identidad online son seguras

Una de las claves más importantes para la seguridad en internet es no utilizar la misma contraseña para todo. Es básico. Pero si tienes más de una cuenta de correo, perfiles en las redes sociales, registros en una o dos páginas web, el número de contraseñas se va multiplicando. ¿Y quién puede estar seguro de que va a recordar más de cinco contraseñas distintas?

Incluso suponiendo que podemos recordarlas todas, ¿cómo sabemos si son seguras? La compañía de seguridad online Kaspersky Lab ha creado un programa para ayudarnos a determinar si las claves con las que protegemos nuestra identidad online son realmente seguras. Password Check nos dice cuánto tiempo tardaría un hacker en descifrar nuestra contraseña.

El procedimiento es sencillo: introducimos la clave -que la compañía asegura no almacenar ni recordar- y el programa nos informa del tiempo que sería necesario para averiguarla, así como si es suficientemente larga, si la palabra que utilizamos es muy común o si ha detectado algún patrón de tecleado que facilite su descubrimiento.

Podemos hacer distintas pruebas. Si introducimos "madrid", por ejemplo, el programa nos avisa de que nuestra contraseña podría ser descifrafa en un segundo, "más rápido de lo que puedes decir Ooops!". Añadirle la fecha "1976" eleva el nivel de seguridad, pero no mucho: un hacker tardaría 10 segundos en descubrirla, "tiempo suficiente para que un caracol recorra cuatro centímetros".

Algunas claves para crear una contraseña segura
Los expertos en seguridad en la red consideran que la combinación de letras, símbolos y caracteres es la estrategia más adecuada para proteger cualquier tipo de documento, archivo u ordenador. Cuántos más elementos diferentes introduzcamos, más difícil será acertar casualmente con la contraseña correcta.

La introducción aleatoria de caracteres para intentar descubrir un password es especialmente eficaz cuando es una combinación corta. Cuánto más larga y complicada sea una contraseña, más largo y difícil es el proceso de descubrirla.

Si la contraseña es simplemente una palabra, no importa lo rara o larga que sea, existen muchas posibilidades de que descubran nuestro código de acceso. Solo con añadir un símbolo extra, ya aumentamos su complejidad. Por este motivo, los expertos recomiendan que combinemos diferentes caracteres aunque luego nos sea más difícil memorizar dicha contraseña.

En conclusión, la regla más importante es que la contraseña sea larga, y compleja. Pero no es necesario utilizar símbolos y letras al azar que luego sean imposibles de recordar. Según los expertos, valdría con introducir algún número o símbolo en una frase más o menos larga. Y es mejor crear una distinta para cada cuenta.

También hay que tener en cuenta qué queremos proteger con cada clave. No es lo mismo un servicio de música online que uno de banca por intenet. La seguridad de la contraseña puede adaptarse a cada uno de ellos.